viernes, 6 de mayo de 2022

DÍA 7. BREVE MES DE MARÍA. MATER AMABILIS

DÍA 7. BREVE MES DE MARÍA. MATER AMABILIS

Breve mes de María. Devoto obsequio de las familias cristianas a la Madre de Dios en el mes de Mayo compuesto principalmente con textos de san Alfonso María de Ligorio y ejemplos escogidos.

 

+Por la señal de la santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

A fin de que sea más eficaz nuestra oración delante de Dios y muy agradables nuestros obsequios a la Virgen María, poniéndonos en su santa presencia, purifiquemos antes nuestra alma de los pecados y faltas haciendo de todo corazón un acto de contrición: Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío. Por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido. También me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta. Amén.

 

Oración para comenzar todos los días: 

Acordaos, oh piadosísima Virgen María,

que jamás se ha oído decir

que ninguno de los que han acudido a tu protección,

implorando tu asistencia y reclamando tu socorro,

haya sido abandonado de ti.

Animado con esta confianza, a ti también acudo, oh Madre, Virgen de las vírgenes,

y aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados,

me atrevo a comparecer ante tu presencia soberana.

No deseches mis humildes súplicas,

oh Madre del Verbo divino,

antes bien, escúchalas y acógelas benignamente. Amén

***

MES DE MARÍA

DÍA 7

 

CONSIDERACIÓN

Mater amabilis (Madre amable) -Escribe Ricardo de San Lorenzo: Fue la bienaventurada Virgen amable a los ojos del mismo Dios. Tan bella fue María a los ojos de Dios, que quedó enamorado de su belleza. ¡Qué bella eres, amiga mía, qué bella eres! Por lo cual la llamó única paloma suya y la única perfecta. Es cierto, dice el padre Suárez, que Dios ama más a María que a todos los otros santos juntos, y con razón, pues ella sola ama más a Dios que no lo amaron todos los hombres y todos los ángeles. ¡Oh, bellísima María, Vos habéis ganado el corazón de Dios; tomad ahora nuestro pobre corazón; hacednos santos! Os amamos y confiamos en Vos. Madre amable, rogad por nosotros.

 

EJEMPLO

Era muy devota de María la beata Eulalia, de la Orden del Císter, y cada día se ocupaba en honrarla; más, por otra parte, rezaba el Avemaría con poco recogimiento. Un día, estando del todo despierta, se le apareció la Virgen y le preguntó si dormía. Eulalia, recreada por tan dulce visión, pero atemorizada por esta pregunta, respondió que estaba enteramente desvelada. Entonces María le habló así: «La hija no ha de temer la visita de su piadosa Madre, pero si quieres que esté más contenta no digas el Avemaría tan fríamente, como sueles». La Virgen quería indicar esta negligencia y frialdad al preguntarle si dormía, a pesar de que la veía despierta.

¿Qué tendría que decir la Madre de Dios de nuestras Avemarías y de nuestras oraciones? Examinémoslas y procuremos la enmienda.

 

PEREGRINACIÓN Y VISITA ESPIRITUAL

Hoy haremos la peregrinación y la visita espiritual a NUESTRA SEÑORA DE LA CINTA, EN TORTOSA, y unidos en espíritu con todos los fieles que hoy practican esta devoción, pidámosle las gracias especiales que más nos convengan. (3 Avemarías)

 

FLOR ESPIRITUAL PARA MAÑANA

Hacer todos los días un obsequio o rezar una plegaria especial a la Santísima Virgen, para que nos alcance la gracia de la perseverancia final.

 

DESPEDIDA

Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues todo un Dios se recrea en tan graciosa belleza. A ti, celestial Princesa, Virgen Sagrada María, te ofrezco en este día alma, vida y corazón. Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía.

 

***

Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío.

Inmaculado Corazón de María, sed la salvación mía.

Glorioso Patriarca san José, ruega por nosotros.

Santos Ángeles Custodios, rogad por nosotros.

Ave María Purísima, sin pecado concebida.