MARTES DE LA I SEMANA DE PASIÓN
Forma Extraordinaria del Rito Romano
A mí el mundo me aborrece porque demuestro que sus
obras son malas.
Evangelio según San Juan 7, 1-13
Después
de estas cosas, recorría Jesús Galilea, pues no quería andar por Judea porque
los judíos trataban de matarlo. Se acercaba la fiesta judía de las
Tiendas. Le decían sus hermanos: «Sal de aquí y marcha a Judea para que también
tus discípulos vean las obras que haces, pues nadie obra nada en secreto,
sino que busca estar a la luz pública. Si haces estas cosas, manifiéstate al
mundo». Y es que tampoco sus hermanos creían en él. Jesús les dice:
«Mi tiempo no ha llegado todavía, el vuestro está siempre dispuesto. El
mundo no puede odiaros a vosotros, a mí sí me odia porque doy testimonio contra
él de que sus obras son malas. Subid vosotros a la fiesta. Yo no subo a esta
fiesta, porque mi tiempo no se ha cumplido todavía». Después de decir
estas cosas, permaneció en Galilea. Una vez que sus hermanos se hubieron
marchado a la fiesta, entonces subió él también, no abiertamente, sino a
escondidas. Los judíos lo buscaban en la fiesta y decían: «¿Dónde está?»,
y había muchos comentarios acerca de él entre las turbas. Unos decían:
«Es bueno»; otros decían: «No, sino que engaña a la gente». Pero nadie
hablaba de él en público por miedo a los judíos.