martes, 15 de agosto de 2017

EL ROSARIO DE HOY EN LA SOLEMNIDAD DE LA ASUNCIÓN CON SAN JUAN PABLO II



 Santo Rosario.
Por la señal... 
Monición inicial: Se celebra hoy la solemnidad de la Asunción de la bienaventurada Virgen María, Madre de nuestro Dios y Señor Jesucristo, que, acabado el curso de su vida en la tierra, fue elevada en cuerpo y alma a la gloria de los cielos. Esta verdad de fe, recibida de la tradición de la Iglesia, fue definida solemnemente por el papa Pío XII en 1950.
Con algunas oraciones del Papa Juan Pablo II meditamos el rosario de hoy.
Señor mío Jesucristo... 
MISTERIOS DOLOROSOS
1. La Oración de Jesús en el Huerto
“¡Dios te salve María, mujer de fe, primera entre los discípulos! Virgen, Madre de la Iglesia, ayúdanos a testimoniar siempre la esperanza que nos habita, teniendo confianza en la bondad del hombre y en el amor del Padre. Enséñanos a construir el mundo, desde el interior: en lo profundo del silencio y de la oración, en la alegría del amor fraterno, en la fecundidad insustituible de la Cruz.”
2.- La flagelación de Jesús atado a la columna.
“A ti, oh María, recurrimos confiados. Ayúdanos a construir un mundo en el que la vida del hombre se vea siempre amada y defendida; toda forma de violencia, desterrada; la paz, por todos tenazmente buscada.”
3.- La coronación de espinas
María, Virgen Inmaculada, Mujer del dolor y de la esperanza, sé benigna con toda persona que sufre y obtén a cada uno la plenitud de vida.  Abraza a todos con tu corazón de Madre. Reina del mundo entero, Virgen santísima, ruega por nosotros.”
4.- Nuestro Señor con la cruz a cuestas camino del Calvario
María, Estrella luminosa de la mañana  puesta por Dios  sobre el horizonte de la humanidad, extiende benigna tu manto sobre nosotros, peregrinos en los caminos del tiempo entre múltiples peligros y asechanzas, e interviene en nuestro auxilio  ahora y en la hora de nuestra muerte.”
5.- La crucifixión y muerte del Señor
 “¡Dios te salve María, virgen dolorosa, Madre de los vivos! Virgen esposa ante la Cruz, nueva Eva, sé nuestra guía por los caminos del mundo, enséñanos a vivir y a transmitir el amor de Cristo, enséñanos a permanecer contigo junto a las innumerables cruces en las que tu Hijo todavía está crucificado.”