HISTORIA

Fachada principal de la iglesia

En el centro del casco histórico de Toledo, muy cerca de la parroquia de Santo Tomé, a la que pertenece, se encuentra la antigua iglesia del Salvador como prenda permanente del paso de la historia.
Considerada por algunos como la más antigua de la ciudad, se convirtió en mezquita aljama tras la consagración como iglesia de la mezquita mayor en el solar de la actual catedral en el año 1085.
Los vestigios romanos existentes en el interior del templo nos hacer retroceder a los orígenes de un primitivo edificio del siglo II.
De la antigua iglesia visigótica se conserva la famosa pilastra con representaciones de algunos milagros de Jesús, así como otros temas de matiz eucarístico que aluden a Cristo como salvación y cuya iconografía parece retomada de algún sarcófago paleocristiano que pudo servir de modelo. Otros elementos arquitectónicos visigodos fueron utilizados posteriormente en la construcción de la mezquita.
Aunque conserva la figura del alminar, que lleva incrustaciones de cenefas visigóticas, tras la conversión al culto cristiano en 1159 se hicieron diversas modificaciones, especialmente, la construcción de la capilla gótica de Santa Catalina, de finales del siglo XV.
En 2009, se concluyó su restauración, y desde entonces se combina su dedicación al culto católico en la Forma Extraordinaria del Rito Romano y  la apertura turística. 

Plano de la actual distribución del interior del templo