ESTEMOS PRONTOS A LUCHAR. San Beda el Venerable
Sermón de S. Beda el Venerable, Presbítero.
Sermón 18 sobre los Santos.
Que la esperanza de obtener este galardón de las obras saludables nos atraiga; estemos prontos a luchar, y corramos todos por el estadio de la justicia, puesto que Dios y su Cristo nos contemplan. Y ya que hemos empezado a hacernos superiores al mundo y al siglo, vigilemos para que ningún deseo terrenal retarde nuestra carrera. Si al llegar el último día nos encuentra libres de todas estas cosas, corriendo raudos por el estadio de las buenas obras, el Señor recompensará nuestros méritos.
El mismo que dará como premio del sufrimiento una corona púrpura a los que vencieron en la persecución, dará una corona blanca a los que venzan en la paz. Ni Abrahán, ni Isaac, ni Jacob sufrieron el martirio, y no obstante, esclarecidos por los méritos de su fe y justicia, merecieron ser los primeros entre los patriarcas; y en el convite de estos grandes justos es donde se sienta todo el que es hallado fiel, justo y digno de alabanza. Tened presente que debemos hacer la voluntad de Dios y no la nuestra; porque el que hace la voluntad de Dios permanece eternamente, como permanece eterno el mismo Dios.
Estemos siempre dispuestos a hacer la voluntad de Dios, con espíritu íntegro, fe firme, virtud robusta y caridad perfecta, observando valerosamente los mandamientos del Señor: la inocencia en la simplicidad, la concordia en la caridad, la humildad en la modestia, la exactitud en los empleos, la atención en la asistencia a los afligidos, la misericordia en el socorro de los pobres, la constancia en la defensa de la verdad, la discreción en la severidad de la disciplina; procurando dar en todo ejemplo de buenas obras. Tales son las huellas que, de vuelta a la patria, nos han dejado todos los santos, para que, siguiendo sus pasos, podamos seguirles y llegar a participar de su felicidad.