martes, 30 de mayo de 2023

FIDELIDAD AL VERDADERO PASTOR. Dom Gueranger


Martes de Pentecostés

Dom Gueranger

FIDELIDAD AL VERDADERO PASTOR. — Proponiendo este pasaje evangélico a los neófitos de Pentecostés, quiere la Iglesia ponerlos en guardia contra un peligro con que pueden chocar en el curso de la vida.

 

En el momento presente, son el rebaño de Jesús, el buen Pastor, y este divino Pastor se halla representado ante ellos por los hombres que El mismo ha confiado el encargo de apacentar sus corderos. Estos hombres han recibido su misión de Pedro, y todo el que se halla con Pedro se halla también con Jesús. Pero sucede muchas veces que se introducen falsos pastores en el aprisco y el Salvador los califica de salteadores y ladrones, porque, en lugar de entrar por la puerta, penetran por las tapias en el redil. Nos dice que El mismo es la Puerta por la que deben pasar todos los que tienen derecho a apacentar su rebaño. Todo pastor, para no pasar por ladrón, debe recibir la misión de Jesús, y esta misión no puede venir sino por medio de aquel que ha establecido para que ocupe su puesto hasta que venga El mismo en persona. El

 

Espíritu Santo ha derramado sus dones en las almas de estos nuevos cristianos; pero las virtudes que brillan en ellos no se pueden ejercer de suerte que les sirvan para alcanzar la vida eterna, sino en el seno de la Iglesia verdadera. Si en lugar de seguir al legítimo pastor tienen la desgracia de entregrarse a falsos pastores, todas estas virtudes resultan estériles. Deben, pues, huir como de un mercenario de aquel que no ha recibido su misión del Maestro, que únicamente puede conducirles a los pastos de vida. Frecuentemente, en el correr de los siglos se han encontrado pastores cismáticos; es deber de los fieles el huir de ellos y todos los hijos de la Iglesia deben prestar atención a la prevención que nuestro Señor les dirige aquí. La Iglesia que El ha fundado y que gobierna por medio de su Espíritu Santo tiene como carácter y distintivo el ser Apostólica. La legitimidad de la misión de los pastores se manifiesta por la sucesión; y como Pedro vive en sus sucesores, el sucesor de Pedro es la fuente del poder pastoral. Quien está con Pedro, está con Jesucristo.