27 de septiembre
SANTOS COSME y DAMIÁN, Mártires
Curad enfermos, resucitad muertos,
limpiad leprosos, lanzad demonios,
dad gratuitamente lo que gratuitamente habéis recibido.
(Mateo, 10, 8).
Los dos hermanos, Cosme y Damián, originarios de
Arabia, fielmente observaron este consejo divino. Médicos, cuidaban
gratuitamente a los enfermos, y su fe, mucho más aún que su ciencia, obraba
curaciones maravillosas, espirituales y corporales. Cuando estalló la
persecución de Diocleciano, fue imposible para hombres tan eminentes y
distinguidos escapar a las investigaciones. Fueron detenidos por orden de
Lisias, gobernador de Cilicia, y, después de diversos tormentos, fueron
decapitados, sin duda en el año 303.
MEDITACIÓN CADA CUAL EN SU POSICIÓN
DEBE TRABAJAR POR EL CIELO
I. Cada cual quiere descollar en su posición; para
lograrlo no hay trabajo que se ahorre; si no alcanza para ello el día, se
trabaja durante la noche. En cambio, en la profesión de cristiano, ¡cuán raro
es este celo! ¡Cuántos hay, asimismo, que tienen miedo de parecer cristianos;
que retroceden, no delante de las amenazas de un perseguidor, sino ante los
sarcasmos de cristianos como ellos! ¡Extraña ceguera! ¡El artesano ejerce
públicamente su oficio por humilde que sea, y no se avergüenza de su dignidad
de cristiano! Nadie reconoce en ti a un cristiano. (Tertuliano)
II. Debes cumplir tus deberes de estado
cristianamente, es decir, de la manera como Dios lo quiere. Para esto, ofrece a
Dios, por la mañana, el trabajo de todo el día, protestando que por obedecerle
vas a trabajar. Si eres fiel a esta práctica, te cuidarás durante el día de no
manchar con el pecado el trabajo que has consagrado al Señor.
III. No te contentes con ofrecer tus acciones a Dios,
esfuérzate por hacer todos los días alguna cosa por Él, con la única mira de
agradarle. Trabaja en la gloria de Dios o en el alivio de los pobres: no hay profesión
ni oficio que no nos brinde ocasiones para ello. Da a los pobres a fin
de darte a ti mismo: lo que les des no lo perderás, lo que les
rehúses pasará a mano de otro. (San Pedro Crisólogo).
La caridad
Orad por los pobres.
ORACIÓN
Haced, os lo suplicamos, Dios omnipotente, que
honrando el nacimiento al cielo de vuestros santos mártires Cosme y Damián, nos
veamos libres por su intercesión de todos los males que nos amenazan. Por J. C.
N. S. Amén.