lunes, 29 de junio de 2020

NO HAY SEGURIDAD EN EL EVANGELIO, SINO ESTÁ CONFIRMADO POR PEDRO. San JErónimo

29 de junio
 COMENTARIO AL EVANGELIO DE SAN JERÓNIMO
SOLEMNIDAD DE SAN PEDRO
Todo esto no debe molestar al lector, sino que para él y para mí es útil: así admitiremos que, antes de presentarse el apóstol Pablo, ya sabía Pedro muy bien que la Ley no debe observarse después del Evangelio; él mismo había sido el promotor de ese decreto. Finalmente, tal era la autoridad de Pedro, que Pablo escribe en su carta: Después de tres años subí de nuevo a Jerusalén a ver a Pedro y me quedé en su casa quince días. Sigue a continuación: Después de catorce años, subí de nuevo a Jerusalén con Bernabé, llevándome a Tito. Pero subí en virtud de una revelación y les expuse el Evangelio que predico entre los gentiles. Así da a entender que no tenía seguridad en la predicación de su Evangelio, si no lo veía confirmado por Pedro y los demás que con él estaban.
San Jerónimo epístola 75 a San Agustín