lunes, 6 de octubre de 2014

EL SANTO ROSARIO DE HOY CON SAN BRUNO


Santo Rosario.
Por la señal... 
Monición inicial: Se hace hoy memoria de San Bruno, sacerdote, que, oriundo de Colonia, se dedicó a ensañar Teología, pero deseando llevar vida solitaria, con algunos discípulos se instaló en el apartado valle de Cartuja, en los Alpes, dando origen a una Orden que conjuga la soledad de los eremitas con la vida común de los cenobitas. Llamado por el papa Urbano II a Roma, para que le ayudase en las necesidades de la Iglesia, pasó los últimos años de su vida como eremita en el cenobio de La Torre, en Calabria (1101).
Con algunos de sus textos, meditamos el rosario de hoy.
Señor mío Jesucristo…
MISTERIOS GOZOSOS
1.- La encarnación del Hijo de Dios en las entrañas purísimas de la Virgen María.
La verdadera obediencia “no puede existir sin mucha humildad y una excepcional abnegación. Le acompaña siempre un amor muy puro del Señor y una auténtica caridad hacia los demás.”
2.-La Visitación de Nuestra Señora a su prima santa Isabel.
“Yo reboso alegría, viendo que en vosotros, que no sabéis leer ni escribir, el Dios Todopoderoso escribe con su dedo, en vuestros corazones, el amor y el conocimiento de su santa ley. Sí; demostráis con vuestras obras lo que amáis y lo que conocéis, cuando practicáis con tanta prudencia y generosidad la verdadera obediencia.”
3.-El nacimiento del Niño Dios en el portal de Belén
““¿Hay algo más contrario y más opuesto a la razón, a la justicia y a la misma naturaleza, que amar más a la criatura que al Creador, que buscar los bienes pasajeros más que los eternos, las cosas de la tierra más que las del cielo?.”
4.-La purificación de Nuestra Señora y presentación del Niño Jesús en el templo
"Poderoso y temible es aquél a quien has hecho voto de entregarte como ofrenda agradable a sus ojos: no tienes derecho a faltarle a la palabra dada, y ni siquiera a ti te interesa hacerlo, pues no soporta que, impunemente, se burlen de Él."
5.- El niño Jesús perdido y hallado en el templo
“Quien es amigo del mundo, se convierte en enemigo de Dios. ¿Qué hacer sino creer los consejos divinos, creer a la Verdad que no puede engañar? Ella da esta advertencia a todos: "Venid a mí todos los que andáis cargados y agobiados y yo os aliviaré". ¿Y no es una carga terrible e inútil estar atormentado por sus deseos, verse sin cesar maltrecho por las preocupaciones y angustias, por el temor y dolor que engendran tales deseos?”