viernes, 9 de octubre de 2015

EL ROSARIO DE HOY CON EL BEATO JOHN HENRY NEWMAN


Santo Rosario.
Por la señal... 
Monición inicial: Se hace hoy memoria del Beato John Henry Newman, sacerdote y cardenal, que por gracia divina y sus estudios de la historia de la fe se convirtió del anglicanismo a la fe católica. Entregó su alma a Dios tal día como hoy de 1890. Él decía: "El rosario es un Credo hecho oración."  Con algunos pensamientos suyos, lo meditamos hoy.
Señor mío Jesucristo…

MISTERIOS DOLOROSOS
1. La Oración de Jesús en el Huerto
“Todos se encuentran ahí: sólo falta una persona; y no estaba porque Ella que no tuvo parte en el pecado, era la única que podía consolarte; por eso no estaba cerca de los pecadores. María estaría cerca de Ti en la Cruz, y lejos de Ti en el huerto. Ha sido tu compañera y tu confidente durante tu vida; intercambió contigo los puros pensamientos y santas meditaciones de treinta años; pero su oído virginal no puede percibir, ni su corazón inmaculado concebir, lo que ahora se te presenta cual visión delante de tu vista. Sólo Dios pudo soportar tal prueba; algunas veces has mostrado a tus Santos la imagen de un pecado, como aparecen a la luz de tu faz, o de pecados veniales, y no de mortales; y ellos nos han dicho que su vista les acarreó todos los horrores menos la muerte, y, los hubiera muerto si no hubieran sido instantáneamente retirados. La Madre de Dios aun con toda su Santidad, ni aun en razón de ella, podría haber soportado ni una parte de aquella innumerable progenie de Satanás que ahora te cerca. Es la eterna historia del mundo, y Dios solamente puede soportar su peso.”.
2. La flagelación de Jesús atado a la columna.
“Hermanos míos, Cristo sangró an¬tes de tiempo; Cristo derramó su sangre, pues su Alma agónica rompió su envoltura humana y fluyó en sangre al exterior. Su Pasión comenzó por su interior. Aquel atormentado corazón, centro de ternuras y de amor, comenzó a trabajar y golpear vehemente y más de lo que podía soportar según las leyes naturales; “los ci¬mientos del abismo profundo se quebraron”; el rojo fluido vital circuló tan abundante y vigorosamente por todo su cuerpo, que desbordando las venas y aflorando por los poros, detúvose como copioso rocío sobre su sacrosanta piel, convirtiéndose luego en go¬tas que rodaron henchidas y pesadas empapando la tierra..”
3. La coronación de espinas
“Nos detendremos, especialmente, hermanos míos en Jesucristo, a considerar los sufrimientos corporales de la prisión de Jesús, su peregrinación ante los jueces, sus golpes y heridas, sus azotes, la corona de espinas, los clavos, la Cruz. Todo esto está compendiado en el Crucifijo que pende ante nuestra vista: todo esto está representado en su sacrosanta carne, pendiente de la Cruz, y al verlo se nos facilita la meditación.”
4. Nuestro Señor con la cruz a cuestas camino del Calvario
“Dios Te rodea con sus cuidados y te lleva en sus brazos, te alza y te deposita en el suelo. Ve tu auténtico semblante ya esté sonriendo o cubierto de lágrimas, sano o enfermo. Vigila con ternura tus manos y tus pies, oye tu voz, el latido de tu corazón y hasta tu respiración. Tú no te amas a ti mismo más de lo que Él te ama.”
5. La crucifixión y muerte del Señor

“Te pido, ¡Oh, mi buen Jesús!, por la Santa Iglesia, tu amada esposa, y nuestra verdadera Madre, por todas las almas de los justos y por todos los pobres pecadores, por los afligidos y por los moribundos, y en fin, por toda la humanidad. No has de permitir que tu Sangre sea derramada en vano. Finalmente, dígnate aplicarla para aliviar las penas de las almas del purgatorio, y particularmente las de aquellos que en su vida practicaron esta santa devoción de adorarte en la Cruz.”
Se  recomienda en el mes de octubre la oración A vos bienaventurado San José