Santo
Rosario.
Por la
señal...
Monición inicial:
Hoy,
primer sábado de mes, ofrecemos este rosario en reparación al Corazón
Inmaculado de María respondiendo así a su llamada en la ciudad de Pontevedra
(ESPAÑA) a Sor Lucía, a quien la Virgen se apareció en Fátima: "Mira, hija
mía, mi Corazón cercado de espinas que los hombres ingratos me clavan sin cesar
con blasfemias e ingratitudes. Tú, al menos, procura consolarme y di que a todos
los que, durante cinco meses, en el primer sábado, se confiesen, reciban la
Sagrada Comunión, recen el Rosario y me hagan compañía durante 15 minutos
meditando en los misterios del rosario con el fin de desagraviarme les prometo
asistir en la hora de la muerte con las gracias necesarias para su
salvación."
Ofrecemos
el rosario como acto de reparación:
-por las
blasfemias y ultrajes que se cometen contra la Inmaculada Concepción de María.
-por las
blasfemias y ultrajes que se cometen contra la Virginidad perpetua de Nuestra
Señora.
-por las
blasfemias y ultrajes que se cometen contra la maternidad divina de María,
rechazando al mismo tiempo recibirla como Madre de los hombres.
-por
aquellos que infunden en los niños y en los jóvenes el desprecio hacia la
Virgen Inmaculada.
-por
aquellos que ultrajan, desprecian y maltratan las imágenes y representaciones
de la Virgen Santísima.
*** PARA
RECIBIR LA PROMESA DE LOS CINCOS PRIMEROS SÁBADOS ES NECESARIO, DURANTE CINCO
SÁBADOS SEGUIDOS: 1) Rezar el rosario y meditar en sus misterios y 2) Confesar
y comulgar con esta intención.***
Meditamos el rosario de hoy con pensamientos san Rafael Arnáiz Barón,
religioso de la Orden Cisterciense, que, aquejado todavía novicio por una grave
enfermedad, soportó con gran paciencia su maltrecha salud, confiando siempre en
el Señor. Murió en el año 1938. En este tiempo de Cuaresma hagamos suya su
oración: “¡Virgen María, Madre de los Dolores!, cuando mires a tu Hijo
ensangrentado en el Calvario, déjame a mí que humildemente recoja tu inmenso
dolor, y déjame que, aunque indigno, enjugue tus lágrimas.”
Señor mío Jesucristo...
MISTERIOS
GOZOSOS
1.- La encarnación del Hijo de Dios en las entrañas purísimas de
la Virgen María..
“Aceptar la voluntad de Dios, pero no con
resignación, sino con alegría.”
“Por el alma
silenciosa navegan los pensamientos de Dios; y cuanto más silencio, más paz,
más serenidad y más facilidad para estar en la presencia del Señor.”
2.-La Visitación de Nuestra Señora a su prima santa Isabel.
“No hace falta para ser grandes santos,
grandes cosas. Basta el hacer grandes las cosas pequeñas... Dios me puede hacer
tan santo pelando patatas que gobernando un imperio.”
3.-El nacimiento del Niño Dios en el portal de Belén
“Mira delante de
Jesús lo que eres, y aprende a conocerte; así no tendrás soberbia, y en tu
propia humillación aprenderás algo de humildad, que aún no sabes lo que eso es,
y es necesario que lo aprendas.”
4.-La purificación de Nuestra Señora y presentación del Niño
Jesús en el templo
“Bástete
purificar la intención en todo momento, y en todo momento amar a Dios; hacerlo
todo por amor y con amor... El hecho en sí no es nada y nada vale. Lo que vale
es la manera de hacerlo.
Señor, no mires
mis hechos, ni mis palabras, mira mi intención y cuando ésta no vaya bien encaminada
a Ti, enderézala. No permitas, Señor mío, que sea desagradecido o pierda el
tiempo.”
5.- El niño Jesús perdido y hallado en el templo
“Que vengan los
sabios preguntando dónde está Dios. Dios está donde el sabio con la ciencia
soberbia no puede llegar... Dios está en el corazón desprendido..., en el
silencio de la oración, en el sacrificio voluntario al dolor, en el vacío del
mundo y sus criaturas.”
MISTERIOS DOLOROSOS
1. La Oración de Jesús
en el Huerto
“Dame, Señor,
esa paciencia que hace de los hombres santos; dame esa paciencia que me es tan
necesaria, para llevar el peso de las tribulaciones en esta vida que a veces me
parece tan larga.”
2. La flagelación de
Jesús atado a la columna.
“En el mundo se
lloran intereses materiales, viles y deleznables... En el mundo se llora poco
por Cristo. En el mundo se sufre poco por Dios.”
3. La coronación de
espinas
“Solamente a los
pies de tu Cruz, viéndote clavado en ella, se aprende a perdonar, se aprende
humildad, caridad y mansedumbre..”
4. Nuestro Señor con
la cruz a cuestas camino del Calvario
“Déjame, Señor,
llorar, pero llorar de ver lo poco que puedo hacer por Ti, lo mucho que te he
ofendido estando lejos de tu Cruz... Déjame llorar el olvido en que te tienen
los hombres, aún los buenos...
Déjame, Señor,
vivir al pie de tu Cruz... de día, de noche, en el trabajo, en el descanso, en
la oración, en el estudio, en el comer, en el dormir, ..., siempre...
siempre....”
5. La crucifixión y
muerte del Señor
“El camino dulce
de la Cruz..., es el sacrificio, la renuncia, a veces la batalla sangrienta que
se resuelve en lágrimas en el calvario, o en el huerto de los Olivos; el
camino, Señor, es ser el último, el enfermo, el pobre oblato trapense que a
veces sufre junto a la Cruz.
Bendito Jesús,
¿qué me enseñarán los hombres, que no enseñes Tú desde la Cruz?”
MISTERIOS GLORIOSOS
1.-La Resurrección del
Señor.
“Antes todo me
llevaba a Ti,... Todo me hablaba de tu inmensa bondad, de tu grandeza; ahora
también te alabo en las criaturas, Señor... pero el sol me parece pequeño...,
el cielo azul es hermoso, pero no eres Tú, la belleza del mundo... es tan
poquita cosa.
¡Cómo me cansan
las criaturas, Señor y Dios mío! ¡Qué sinsabor más grande me cansa el tratar
cosas del mundo, el hablar de negocios temporales, el escuchar noticias...!
¡Ah!, Señor, nada quisiera saber, ni escuchar... Sólo Tú, Señor, solo Tú.”
2.- La Ascensión del
Señor
“Dios vive en el
corazón del hombre, cuando este corazón vive desprendido de todo lo que no es
Él. Tenemos tal cúmulo de atenciones, distracciones, aficiones, deseos de
vanidades, presunciones; tenemos tanto mundo dentro, que Dios se aleja...”
3.- La Venida del
Espíritu Santo sobre los Apóstoles reunidos en torno a la Virgen María
“Señor, cuánto
quisiera amarte. ¡Ayúdame, Madre mía!.
He de amar la
soledad, pues Dios en ella me pone.
He de obedecer a
ciegas, pues Dios es el que me ordena.
He de mortificar
continuamente mis sentidos.
He de tener
paciencia en la vida de comunidad.
He de
ejercitarme en la humildad.
He de hacer todo
por Dios y por María.”
4.- La Asunción de
María Santísima a los Cielos
“El alma
comprende que nada en el mundo la puede llenar... La tierra es de barro, los
hombres son pobres, la vida muy corta, todo es muy pequeño, frágil y caduco...,
y el alma está ansiosa de verse en el cielo, mirando a la Virgen, contemplando
a Dios.”
5.- La Coronación de
la Virgen como Reina y Señora de todo lo Creado.
"A los pies de la
Virgen lo pongo todo. Hay que querer mucho a la Virgen, hay que contárselo
todo, es una verdadera madre.”
*Si se rezan los misterios luminosos:
MISTERIOS
LUMINOSOS
1.-El Bautismo del Señor en el Jordán
“Dios no me pide
más que amor humilde y espíritu de sacrificio. Dios no nos exige más que
sencillez por fuera y amor por dentro.”
2.-El Milagro de las Bodas de Cana
“Busquemos la
ayuda de María y nada temamos… No esperes nada de los hombres, ni aún de los
más santos, pues cuanto más pongas en ellos, mayor será el desengaño algún día.”
3.- El anuncio del Reino invitando a la conversión.
“He aquí la vida
de oración... No hay que poner lo que ya está, sino que hay que quitar lo que
sobra. Quita de tu corazón lo que estorba y en él hallarás a Dios.”
4.-La Transfiguración del Señor
“Muchas veces no
llegamos a comprender la grandiosidad que se encierra en un acto de sencillez,
porque buscamos lo grande en lo complicado, buscamos la grandiosidad de las
cosas en la dificultad de las mismas.”
5.- La institución de la Eucaristía
“Multitud de
Sagrarios existen en la redondez de la tierra, pero solamente un Dios, que es
Jesús Sacramentado. Consoladora verdad que hace estar tan unidos el monje en su
Coro, el misionero en tierra de infieles, y el seglar en su parroquia. Ni hay
distancias, ni hay edades..., al pie del Sagrario estamos todos cerca, Dios nos
une. Pidámosle, por mediación de María, que algún día allá en el cielo podamos
contemplar a ese Dios que por amor al hombre, se oculta bajo las especies de
pan y vino. Así sea.”