jueves, 6 de febrero de 2025

7 de febrero. DE LO QUE JESÚS PADECIÓ EN EGIPTO. P. AVANCINI

7 de febrero

DE LO QUE JESÚS PADECIÓ EN EGIPTO

 

MEDITACIONES

DE LA OBRA

“VIDA Y DOCTRINA DE JESUCRISTO”

DEL P. NICOLÁS AVANCINI

 

 

ORACIÓN PARA COMENZAR

TODOS LOS DÍAS:

 

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Poniéndonos en la presencia de Dios, adoremos su majestad infinita, y digamos con humildad:

  

 “Omnipotente Dios y Señor y Padre mío amorosísimo, yo creo que por razón de tu inmensidad estás aquí presente en todo lugar, que estás aquí, dentro de mí, en medio de mi corazón, viendo los más ocultos pensamientos y afectos de mi alma, sin poder esconderme de tus divinos ojos.

    Te adoro con la más profunda humildad y reverencia, desde el abismo de mi miseria y de mi nada, y os pido perdón de todos mis pecados que detesto con toda mi alma, y os pido gracias para hacer con provecho esta meditación que ofrezco a vuestra mayor gloria… ¡Oh Padre eterno! Por Jesús, por María, por José y todos los santos enseñadme a orar para conocerme y conoceros, para amaros siempre y haceros siempre amar. Amén.”

 

Se meditan los tres puntos dispuestos para cada día.

 

7 de febrero

DE LO QUE JESÚS PADECIÓ EN EGIPTO

1. Considera lo que padeció en su alma. Viose en medio de una perversa nación, que negaba a Dios su culto, que le daba a los ídolos, ardiendo Él, como ardía, en celo de la gloria de Dios. Por esto ¡Cómo sería llagada su alma, como quien claramente veía lo que era Dios, y cuanta la gravedad de sus ofensas! ¡Con cuánto afecto ofrecía su propia vida para que se desterrase el pecado! ¡Qué poco celo tengo yo, a quien no sólo no llagan los pecados ajenos, más ni aún apenas los propios! Enciende en ti 1este celo; y atiende principalmente a que tus obras no desagraden a Dios.

2. Considera lo que Cristo en si padeció. La falta no sólo de cosas superfluas, sino también de las necesarias. El desprecio de los hombres, no siendo tenido más que por hijo de un oficial. Y esto no lo padecía por necesidad el Rey de la gloria, sino por voluntad y con gozo, sabiendo que en esto agradaba al Padre. Lastímate de la ceguedad de los egipcios por no conocer a JESÚS. Repara no sea la tuya parecida a la de estos. Admira y alaba la paciencia de Cristo. Más no tengas pereza en imitar lo que gustas de alabar.

3. Considera el dolor que tuvo JESÚS, compadeciéndose de otros. 1. A la verdad: de su santísima Madre y del santo José, a quienes veía que por su causa sufrían aquel destierro; el cual dolor fue sin duda a la medida del amor que les tenía. 2. De los niños inocentes, que por su causa también eran cruelmente despedazados. Aprende a tener compasión de los ajenos males, especialmente de aquellos que, estando aun en la inocencia, son muertos con la espada de un Herodes, o de algún mal compañero. Cuanto trabaja la maldad por pervertir a estos, tanto has de procurar tu traerlos y reducirlos al bien.

 

ORACIÓN PARA FINALIZAR

TODOS LOS DÍAS:

Os doy gracias, Dios mío, por los buenos pensamientos, afectos y propósitos que me habéis inspirado en este rato de oración… Todo os lo ofrezco a vuestra mayor honra y gloria… y os pido gracia eficaz para ponerlos por obra…

¡Oh Padre Eterno! Por Jesús, por María, por José y Teresa de Jesús dadme gracia ahora y siempre para cumplir en todas las cosas vuestra santísima voluntad. Amen."

 

Padrenuestro, Avemaría y Gloria

 

 

***

Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío.

Inmaculado Corazón de María, sed la salvación mía.

Glorioso Patriarca san José, ruega por nosotros.

Santos Ángeles Custodios, rogad por nosotros.

Todos los santos y santas de Dios, rogad por nosotros.

 

***

¡Querido hermano, si te ha gustado esta meditación, compártela con tus familiares y amigos!

***

Ave María Purísima, sin pecado concebida.