PALABRA DE DIOS Y
VOCACIONES
Reflexión diaria acerca de la Palabra de Dios.
Meditemos también en el hecho de que la Palabra llama
a cada uno personalmente, manifestando así que la vida misma es vocación
en relación con Dios. Cuanto más ahondemos en nuestra relación personal con el
Señor Jesús, tanto más nos daremos cuenta de que Él nos llama a la santidad
mediante opciones definitivas, con las cuales nuestra vida corresponde a su
amor, asumiendo tareas y ministerios para edificar la Iglesia.
Todo fiel está llamado a la santidad, cada uno en el
propio estado de vida y es en la Sagrada Escritura es donde encontramos
revelada nuestra vocación a la santidad: «Sed santos, pues yo soy santo». Y san
Pablo muestra la raíz cristológica: el Padre «nos eligió en la persona de
Cristo –antes de crear el mundo– para que fuésemos santos e irreprochables ante
él por el amor» (Ef 1,4). «A quienes Dios ama y ha llamado a formar
parte de su pueblo santo, os deseo la gracia y la paz de Dios, nuestro Padre, y
del Señor Jesucristo» (Rm 1,7).
Cfr.
Verbum Domini, 77